Carta
para ti. Aunque tú no lo sepas. XIV
Es posible que huela a verano
sin haberte conocido todavía. Que cada palabra mía, se te acerque un poco más en
cada carta, antes de precipitarse al vacío en los aeropuertos que no hemos visitado juntos. Es
posible que pueda calcular la hora exacta de partida de cada viaje que nos
perdimos por no conocernos. Yo desperté cinco noches en Londres, y sin embargo
no conozco la calle que acumula tus recuerdos.
Podría detallar un diario de
vuelo a partir de ahora. Imaginando que somos el mismo pasajero y que nos
emocionamos con cada nube que se ve desde el avión. Siempre escogeremos
ventanilla. Y como a mi no me gustan los aterrizajes, te dejo ser la mitad
valiente. La que se deja el miedo con las maletas facturadas y disfruta de cada
segundo en el cielo.
Pd: A donde quieres volar
primero?